Entre 10 y 20 minutos más.

Las razones que lo explican no están del todo claras, pero parece que este efecto podría estar relacionado con la presencia de determinadas hormonas femeninas. De hecho, en la menarquía y en la menopausia se producen importantes alteraciones en estas hormonas, lo que puede provocar alteraciones en los ciclos de sueño», destaca el Dr. Rafael Téllez, responsable Unidad del Sueño de la Clínica IMQ Virgen Blanca

Además de los factores anteriores, el Dr. Téllez añade una hipótesis que manejan los especialistas, «se propone que los cerebros que más se activan en la vigilia, necesitan más el descanso reparador del sueño para equilibrarse. Y parece que la mujer suele estar más en “modo multitarea” diurno que los hombres. Lo que también está comprobado es que ellas son más vulnerables frente a los trastornos del sueño que ellos.

Con relación a lo anterior, las mujeres tienen un 40 por ciento más de probabilidad de tener insomnio que los hombres y también tienen casi el doble de probabilidad de sufrir ansiedad y depresión que los hombres, dos condiciones fuertemente asociadas con el insomnio.